Según Margaret Heffernan ningún futurólogo actual es capaz de predecir algo en el mundo por más de 400 días. Lo inesperado se ha vuelto un “trending” de nuestro tiempo o cómo dice ella en su charla TED, lo impredecible se ha vuelto la norma. 

Hoy todos estamos metidos de cabeza frente a un “device”: smartphone, tablet, desktop, portátil o applewatch. Tenemos app que nos dicen cuántos pasos caminamos, cómo llegar a un lugar en carro o en bus, que nos dicen cuándo debemos despertarnos y dormirnos, si estamos caminando jorobados o no, etc. Supuestamente los “devices” lo hacen todo por nosotros, hasta pensar e interpretar lo que nos está pasando o lo que están sintiendo los otros.  Heffernan dirá que en la medida que le entregamos el control de nuestros proyectos y quehaceres a la tecnología menos habilidades tendremos de nuestra vida. Si todo lo que pensamos y hacemos nos viene de la tecnología llegará un día en que nos daremos cuenta que estamos pensando mal y menos.

Por ello plantea que lo más sorpresivo es la vida misma, lo más inesperado es el mundo, lo más inexplicable por momentos es la conducta humana. En el contacto con la realidad la persona se entrena para lidiar con lo impredecible. En la medida que el contacto sea menor y sólo veamos la realidad a través de la tecnología, las habilidades humanas decrecerán y seremos menos aptos para enfrentar el mundo real.

Hoy en el mundo personal, familiar, profesional y social hay que optar por desarrollar las habilidades humanas. Y esto puede sonar lo más ineficiente e improductivo del mundo. Sin embargo, frente a un mundo donde los patrones ya no se repiten regularmente y donde pequeños cambios vienen generando grandísimos impactos, lo auténticamente humano, como es el fortalecimiento de la persona y de una comunidad viva y fraterna es la mejor inversión. Una persona en desarrollo humano constante en medio de una comunidad con relaciones ricas y significativas es la tierra perfecta para el crecimiento de las competencias humanas necesarias para enfrentar el mundo complejo. La resiliencia y la fortaleza para enfrentar las tormentas personales, sociales y económicas se viven mejor cuando ha habido un mejoramiento personal constante y han ido de la mano de un tejido comunitario y organizacional saludable construido de relaciones confiables, sinceras y nobles.

Parafraseando a Heffernan podemos decir que la eficiencia no nos va a salvar en el futuro. Lo que nos va a permitir “surfear” las olas poderosas del futuro serán las habilidades humanas que nos ayudarán adaptarnos a las nuevas coyunturas y a comprender las señales de lo que está sucediendo en el mundo y la cultura.

Cibergrafía.-

Heffernan, Margaret. The human skills we need in an unpredictable world.

Tomado de  https://www.ted.com/talks/margaret_heffernan_the_human_skills_we_need_in_an_unpredictable_world?utm_campaign=social&utm_medium=referral&utm_source=facebook.com&utm_content=talk&utm_term=business&fbclid=IwAR3geBA7HCDoGdcZzvWtfWdXjrRmUYiGNQuIkx-oClKjPl_8_FBaFmllUcQ#t-934597